Pese al rechazo popular, los diputados del Congreso de la República recibirán, a partir de este mes de febrero, el pago de su salario con el aumento que se recetaron el año pasado cuando aprobaron el presupuesto del Organismo Legislativo.
Los congresistas pasarán de ganar Q17 mil 550 a devengar Q46 mil 700. Aunque la Corte de Constitucionalidad había ordenado que el tema se llevará a votación al pleno, asesores legislativos confirmaron que algunos integrantes de la Junta Directiva del Congreso encontraron una salida legal y acodaron orden el desembolso del aumento a partir de este mes.
El tema consta en un acta que está circulando entre bancadas, en la que se instruye a la Dirección General del Legislativo, efectuar las readecuaciones presupuestarias correspondientes y equiparar el salario de los congresistas con el de los magistrados de las salas de apelaciones.
El presidente del Congreso, Nery Ramos, insistió el martes 25 de febrero, al terminar la sesión plenaria, que no había un acuerdo definitivo respecto al aumento de salario para los diputados, pero este miércoles circuló el acta que lo confirma.
La Alianza por un Congreso Eficiente, dijo en un comunicado que la equiparación del salario de los diputados con el de magistrados de sala no se justifica, debido a que los requisitos académicos y la experiencia profesional para ocupar una magistratura es diferente de la de los diputados; asimismo, los togados trabajan jornadas completas de trabajo, mientras los diputados tienen flexibilidad para ejercer su labor.
Acción Ciudadana presentó el martes ante la Corte de Constitucionalidad, una solicitud de debida dentro del amparo que se otorgó en contra la indemnización de los diputados y aumento salarial, argumentando que no se agotaron los requisitos establecidos en la resolución que incluye llevar el tema a votación ante el pleno.
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